¿Alguna vez te has planteado qué necesitas saber para el diseño de tus objetos impresos en 3D?
La verdad es que no necesitas tener ningún conocimiento previo,(a parte de saber dibujar en algún programa Cad) ni ninguna técnica en especial, prácticamente todos los objetos pueden ser impresos tal cual se diseñen.
Sin embargo existen varias prácticas, consejos o trucos, que ayudan a que tus impresiones sean más económicas, necesiten de menos tiempo de impresión y menos consumibles.
Por todo esto compartimos con vosotros unos cuantos tips que puedes tener en cuenta, a la hora de diseñar tus objetos para imprimirlos en una impresora 3D.
Con la base plana mucho mejor:
Partiendo de la base de que las impresiones son realizadas capa a capa, es ideal, que tu objeto tenga una base plana sobre la que se asienta todo y esta sea la primera parte en imprimir. De esta manera evitamos tener que utilizar materiales de soporte que encarecen la impresión y que su único cometido es el ayudar en la impresión. Por ejemplo: Piensa en una botella, si empezamos por su base, y crecemos poco a poco, es mucho más sencilla su impresión que si la imprimiésemos tumbada, dado que para que la deposición de las capas fuese correcta tendríamos que incorporar materiales de soporte que encarecen la impresión.
Atención especial a los ángulos en el eje Z (Altura):
Hay ocasiones en que tu objeto tiene partes de éste como voladizos o por su forma natural incorpora partes que se quedan en el aire (imagina los brazos de un muñeco). En este caso tenemos dos maneras de actuar. Siempre que el ángulo que exista no sea superior a los 45º, no habrá ninguna complicación añadida, sin embargo si superamos este umbral, necesitaremos de soportes para la impresión si o si. Podemos incorporar un pequeño soporte que ayude a realizar ésta, o utilizar los soportes propios que incorpora el software de laminado, con el consecuente uso añadido de material de impresión que va directamente al desecho.
En ocasiones menos es más:
Otra de las opciones con las que podemos jugar en la impresión 3D, es con la cantidad de relleno de los objetos. En función del fin para el que esté diseñado, podemos optar por realizar piezas macizas o con rellenos con menos cantidad de plástico, con el consecuente ahorro. No obstante la capacidad mecánica de la pieza variará, pero existen muchos casos en los que, incluso podríamos optar por figuras prácticamente huecas, dado que su uso tan solo es para exposición.
Estos son algunas de las dudas más habituales que suelen surgir cuando pensamos en imprimir nuestros objetos en 3D. No obstante si te surge alguna que no hayamos tenido en cuenta, no dudes en dejar tu comentario en la parte inferior y gustosamente intentaremos aclarar todas estas.
¡Muchas gracias!